sábado, 25 de abril de 2015

Elogio de la pereza

Bueno es hacer cosas. Todavía mejor descansar. Por lo menos un día a la semana. A ser posible dos. Si el cuerpo te lo pide y el bolsillo te lo permite prueba con la pereza permanente; un tratamiento que cura casi todos los males menos, lógicamente, el de la pereza.