sábado, 15 de enero de 2011

Deshojando la margarita



Tomar decisiones es todo un reto. Muchos dejamos que otros o el tiempo decidan por nosotros. En ciertos momentos queda poco donde elegir. A ciertas edades el tren de la vida parece un AVE que te lleva inexorable hacia la estación final. Sólo te puedes bajar del tren en marcha y pegarte la hostia de tu vida. Pero mejor libre y malherido que sano y muerto de asco.